Otra vez ha tocado sufrir más de lo debido, pero el Deportivo Alavés ha vuelto a sacar adelante un complicado partido. Los babazorros se han impuesto por 1-0 al Zamora gracias al gol de Geni a los 13 minutos de juego. Gracias a este triunfo, los vitorianos se mantienen en lo más alto de la tabla y vuelven a sumar otra semana más sin encajar un gol. Ese sería el resumen positivo del encuentro. El negativo, los excesivos agobios que pasaron para lograr la victoria. Jugando toda la segunda mitad con un hombre más, no supieron cerrar el marcador, más bien todo lo contrario. Tuvieron que afanarse en tareas defensivas ante un Zamora insistente en ataque pero con poca pegada. El Alavés pareció salir enchufado al partido, y tuvo la fortuna de encontrarse muy pronto con el gol. Apenas cumplido el minuto 13, los vitorianos se adelantaron en el marcador gracias a una acción de picardía. Segura puso en juego con rapidez una falta, pillando por sorpresa a toda la defensa zamorana, Geni recogió el balón totalmente sólo y no tuvo problemas para batir al portero y hacer el 1-0.Sin embargo, tras el tanto, el equipo se relajó. En el 15, el Zamora pudo haber empatado con un potente disparo de Capi desde la frontal que se fue rozando el palo. El Alavés había perdido el control de la pelota y el Zamora, con clara superioridad en el centro del campo, se fue creciendo. Con el paso de los minutos, la escuadra visitante fue creando ocasiones poco a poco. Los de Pereira pasaron de defenderse con solvencia a pasar excesivos apuros. Un buen ejemplo es la jugada del Zamora en el minuto 37. De nuevo Capi protagonizó una buena acción personal, superando a varios defensores, y puso un balón de oro a Edu Rondán, pero el delantero alavés mandó su lanzamiento rozando la escuadra de la portería de Pagola.Afortunadamente, en los últimos minutos del primer periodo, el Alavés recuperó el control y estuvo a punto de haber dejado el choque sentenciado. En el 40, Oscar Rico estrelló un genial lanzamiento de falta directa en el larguero zamorano. Y en el 43, fue el propio Segura el que no llegó por muy poco a un buen centro de Raúl Llorente.En el arranque de la segunda mitad, el partido se le puso todavía más de cara a los vitorianos, o así debería haber sido. Yago vio su segunda cartulina amarilla y tuvo que marcharse de forma anticipada a la caseta, dejando a su equipo con diez. Sin embargo, el Zamora no acusó demasiado esa inferioridad y siguió apretando en busca del empate.Los babazorros, viéndose superiores, siguieron jugando con demasiada confianza. Cedieron la pelota al Zamora y se limitaron a controlar y buscar la sentencia a la contra. Pero no les salió del todo bien el plan. Los visitantes, incluso con uno menos, siguieron acercándose con mucho peligro al área local.El choque se fue abriendo cada vez más con el pase de los minutos. En torno a la hora de juego, Oscar Rico tuvo otra buena ocasión para los de Mendizorroza, pero su disparo duro y seco se fue rozando la madera. En el 70, el Zamora perdonó al Alavés. En una clara contra, con cinco jugadores visitantes atacando a sólo dos defensores locales, Masini se hinchó de balón y disparó desde 25 metros cuando tenía a varios compañeros totalmente desmarcados y en mejor situación. Respiró aliviada la afición vitoriana tras esa acción, lo mismo que un minuto después cuando Otero, tras cazar un balón suelto en el área, lo mandó fuera por muy poco.Pereira no veía claro el desarrollo del partido, y dio entrada a Igor y a Reguero buscando una mayor profundidad y movilidad en ataque. Ciertamente, le dio resultado, pero tampoco demasiado. El Alavés seguía sin tener la pelota y debía emplearse a fondo en defensa.En el minuto 77, Castells tiene que despejar casi in extremis otro balón más dentro del área babazorra. En el 81, Pagola, que estuvo muy serio todo el partido, le sacó un buen balón a Masini. El delantero zamorano fue una pesadilla para la zaga albiazul. En el tiempo de descuento, de nuevo Castells le sacó el balón prácticamente de la misma bota otra vez a Masini, que estaba listo para marcar en boca de gol.
